La apocatástasis es un concepto teológico que se refiere a la idea de que Dios, después de un catastrófico evento cósmico, restaura la creación a un estado mejor que el original, eliminando el mal y la degradación que habría resultado de la caída del hombre. Esta idea se encuentra en varias tradiciones religiosas, incluyendo el cristianismo ortodoxo y el cristianismo oriental.
En el cristianismo ortodoxo, la apocatástasis es vista como una forma de escatología que sugiere que la creación final será perfecta y sin defectos, y que el mal y la muerte serán eliminados. Esta idea se basa en la creencia de que Dios es un Dios de la restauración y la redención, y que su plan es restaurar la creación a un estado original y perfecto.
En el cristianismo oriental, la apocatástasis se asocia con la idea de la «novación», que sugiere que la creación será renovada y restaurada en su forma original, eliminando el mal y la degradación resultante de la caída del hombre.
Es importante destacar que la apocatástasis no se refiere a una especie de «segundo intento» de Dios, sino más bien a una restauración final y perfecta de la creación, después de un evento cósmico que habría destruido todo lo que era malo.